¿Puedes sentir cómo se desprenden tus pies? Miraba a través de dos ventanales, te dije "debe llover" pero no comprendiste, afuera el cielo se caía a gotas. Yo hablaba de ti, de tus ojos, de tus tormentas retenidas con el miedo de dejarlas ir, de abrir la puerta y que el viento fuese demasiado...

Cómo quién a orillas de un precipicio, Ve pasar su vida y estira sus manos para que no se vaya. Hoy fui a embutir mi corazón, sin ánimos de quedar vacía, sólo buscando que no se pudra. Amores que a las andanzas,por mucho que gusten, son un zapato incomodo. Mejor es caminar descalzo, saberse libre, tropezar...