Amarte.

Amarte es extrañarte en silencio,
muerta de ansias de cruzarme de nuevo
con el reflejo de mi sonrisa
en tus ojos.

Amarte es llorar un poco en silencio,
cuando llueve
y sé que el ruido en la calle
ya no es la bocina de algún auto
en el que vienes a rescatarme
de un día gris.

Amarte es no haber dicho 'te amo'
y del mismo modo
haber agotado
las maneras de demostrártelo,
buscándote una y otra vez sin sentido,
huyendo por ti.
huyendo contigo.
huyendo de ti también.

Amarte es contar los días que llevamos sin hablar,
sabiendo que cada día
no es uno menos
sino uno más
y debo alegrarme por haber conseguido
sobrevivir otras veinticuatro horas sin ti
demostrándome a mi misma
que vale más amarme que amarte.

Amarte siempre gana
mientras se pierden las oportunidades de amarnos.
Sé que nunca nos vamos a amar,
que el final de esta historia se escribió
hace ya varios cielos
pero sigo viendo ese puntito titilante a lo lejos
que sigue invitándonos a marte.

Amarte no pesa nada,
no me cuesta,
es espontaneo
y no puedo evitarlo.
Sin embargo amarte
me impide volar lejos de tu recuerdo,
vuelve mi realidad más dura,
me fuerza a evitarte.

Amarte algún día cobrará sentido
me digo.
Por ahora
al menos
amarte
me inspira.
Amarte se ha convertido poesía.