por los rincones donde tu sonrisa ya no se asoma,
por donde me da miedo mirar porque ya no estás,
porque deseo encontrarte en otro lugar.
Se apago una estrella,
pero aún destella en el alma de quienes la adoraron.
Nebulosa brillante eres ahora,
porque en este universo,
todo termina y se transforma.
No habrá lugar a donde miremos,
donde no podamos verte.
No habrá donde refugiarnos
de este dolor inerte,
al verte desvanecerte.
Es cierto, duele que estés ausente.
Pero ya suficiente dolor te llevaste,
y así no hay que recordarte,
sino feliz y sonriente.
Ahora eres azul,
celeste,
brillante,
incandescente,
volátil
fluorecente,
en la mente y el alma,
de quienes te querremos siempre.
A la memoria de Terry Bustamante.
3 comentarios:
Hermoso. Definitivamente el sentimiento que lleva consigo quedó plasmado en cada letra.
Sellado con cada lagrima.
Brillando en cada estrella.
Publicar un comentario